miércoles, 30 de enero de 2013

Chips fraudulentos y Ventolin a mansalva. Planes para la nueva temporada



   -Este año voy a dar mucho que hablar, en serio te lo digo. Voy a ir a full-gas, como Contador.        
-Dandochepazos no está dispuesto a que la historia se repita. Esta vez, nada de tonterías ni de engañabobos; nada de consuelos de fracasado. “Lo importante es pasarlo bien, tomárselo con calma y disfrutar del paisaje”. ¡Chorradas! No, él lo tiene muy claro; va a intentar marcar la diferencia e imponer su ley en las pruebas más duras de la temporada cicloturista. Irati-Xtrem, PaxAvant, Larra-Larrau.... Vamos, lo que le echen.

   -Pero vamos a ver ­-le digo­-, ¿es que no te das cuenta de que con tu físico y tu bicicleta de dominguero, no estás para disputar nada? Bastante tienes con apuntarte a un par de marchas y tratar de no quedar el último. No te da pa más; asúmelo.

Una pobre genética y una bici de gama baja son incompatibles
con los triunfos en el competitivo panorama cicloturista.  
   -¡Qué dirás, qué dirás! No tienes ni idea. Claro, como tú eres un mediocre y un globero, piensas que todos tenemos que ponernos a tu nivel. Pues nada de eso, yo voy a dar un salto de calidad y a luchar por estar con los mejores. Y si no, al tiempo.

   -Ándate con ojo, chaval, a ver si la vamos a tener ­-le advierto­-. Aquí el único mediocre eres tú, que te dejas la vida en el rodillo y haciendo series como un loco; y total, ¿para qué? Si luego no das más que pena, como el año pasado en la Irati Xtrem y en laLarra-Larrau. Yo, por lo menos, acepto mis limitaciones.

   Cansado de las impertinencias de mi amigo, pago mi cerveza y salgo apresuradamente del bar, dejándolo allí plantado y sin tiempo de contraatacar con alguno de sus improperios. ¿Pero que se habrá creído? ¡Si hasta el año pasado nunca había participado en una prueba organizada! A ver si ahora, por terminar un par de marchas, vamos a tener que hacerle la ola. Bueno, allá él y sus delirios; luego, cuando su pobre genética y los casi diez kilos de peso de su BH Zaphire lo pongan en su lugar en las carreteras de los Pirineos, llegará la frustración.

   Ya ha pasado un buen rato desde de mi espantada, pero Dandochepazos sigue sentado en la barra. En la penumbra de aquel tugurio -­-una especie de pub heavy, pero a lo cutre­-, parece confundido. “¿Será cierto que soy tan paquete? ­-se pregunta mientras come cacahuetes y le pega a la Mahou­- ¿Tendré que resignarme a una vida cicloturista sin trofeos ni honores?”

Mugrienta y arrugada, la banderola del tugurio heavy 
necesita un buen repaso. (imagen:IronMaiden.com)
   Aunque lo habitual es que no atienda a razones de ningún tipo, en esta ocasión mis duras palabras parecen haber llevado algo de juicio al mundo de autoengaño y fantasía en el que habita mi camarada. La duda difumina sus convicciones y se asoma a su mirada, que permanece fija en el fondo del mostrador. Allí, arrugada y mugrienta, una bandera de Iron Maiden preside la estancia, sin que nadie le preste ya mucha atención. La enseña muestra un cadáver andante, con una Union Jack en una mano y un sable ensangrentado en la otra, mientras la muerte lo observa todo en un segundo plano, sobre un campo de batalla. “Joder ­-piensa distraído­-, pues sí que tiene roña la banderita; esperemos que el encargado sea un poco más pulcro con los vasos”.

   Un par de cervezas después, abandona la tasca, en la que no quedan ya más que el pálido camarero y su novia, una chavala de extraños ropajes y aspecto de personaje de manga. Hace frío y y está muy oscuro. Con las manos en los bolsillos y los cuellos de su chaqueta de cuero levantados, deambula por el barrio tratando de poner en orden sus pensamientos. “No sé, no sé; a ver si va a ser verdad lo que dice éste; a ver si por mucho que me machaque, ya no tengo margen de mejora”.

PORRONES DE VINO DULCE

   Dandochepazos pasea su incertidumbre por las calles semidesiertas. Aunque es sábado por la noche, apenas se cruza con un par de borrachos, un señor paseando al perro mientras escucha el transistor y algún que otro rebuscador de basura. Nada de extrañar, por otra parte, porque en el barrio no es que abunden precisamente los locales de moda; y los bares de jubilados, con sus partidas de dominó, sus porrones de vino dulce y su menguante clientela, es la única alternativa hostelera al garito heavy. 

   En su triste recorrido entre bloques de ladrillo y plazoletas mal iluminadas, no puede por menos de reconocer que quizá se haya dejado llevar por el entusiasmo a la hora de programar sus metas para la temporada. Hasta ahora, todo el mundo se había limitado a reirle las gracias y a darle la razón cuando, en los foros de ciclismo de internet, se las daba de aspirante a la élite cicloturista. Sin embargo, mis advertencias han hecho que la cruda realidad vaya abriéndose paso, poco a poco, entre sus ilusiones sin fundamento.
Salvo que medio pelotón se vaya por el barranquillo, Dandochepazos no
tiene posibilidad alguna en la cronoescalada final. (imagen:iratiextrem.com)

   Al fin y al cabo, el año anterior no pasó del puesto 346 en la Larra-Larrau y del 432 en la Irati-Xtrem. Aunque se había convencido a sí mismo de que entrenándose más, esta temporada podría situarse entre los mejores, empieza a comprender lo desmesurado de sus expectativas iniciales. Por más que se machacara, muchos participantes iban a tener que despeñarse y muchos chuletones con clembuterol iba a tener engullir para poder siquiera estar entre los cien mejores.

   Además, es evidente que la BH de aluminio, con sus llantas de mercadillo y sus desarrollos de principiante, tampoco está como para competir. Un año más vieja y sin mejora alguna en sus componentes, apenas es un trozo de hierro frente a las máquinas de carbono y piezas de gama alta que, según parece, tiene ya hasta el más pardillo de los globeros. “Menudo imbécil estoy hecho ­-se dice­-. ¿Cómo he podido estar tan ciego? ¿Cómo he podido llegar a engañarme de esta manera?”

   La situación en la que se encuentra es complicada. Después de haber anunciado a diestro y siniestro que iba a dar un golpe de mano en el panorama cicloturista, la sombra del ridículo se cierne una vez más sobre su pellejo. “Es que no aprendo,” se lamenta angustiado, recordando las innumerables veces en las que sus bravatas y sus accesos de euforia han acabado volviéndose en su contra.

TRAPICHEOS

   Lo normal sería retractarse y reconocer que se le había ido la cabeza, para a continuación plantearse unas metas más realistas y aguantar de la forma más digna posible las mofas del personal. ¿Pero para qué actuar con sensatez, cuando un despropósito puede taparse con otro aún mayor? Como Homer Simpson en pleno desbarre, una cascada de ocurrencias va formándose en su mente. Alegar una lesión repentina para escaquearse de sus compromisos, hacer algún trapicheo en los recorridos para poder llegar entre los primeros, aprovechar su asma crónica para inflarse a Ventolín y potenciar así su rendimiento... “¿Por qué no se me ocurrirán más que disparates?” ­piensa, al constatar que es incapaz de alumbrar una idea mínimamente coherente.

   “Estoy vendido; ya puedo prepararme para la que se me viene encima.” Incapaz de encontrar la fórmula que le saque de aquel atolladero, el pobre chaval parece condenado, una vez más, a quedar como un bocazas. “A no ser...”

Para desgracia de algunos, los sistemas de medición de tiempos
no se pueden manipular así como así. (foto:cronochip.com)
   -Oye, Jon, ¿sería posible manipular uno de esos cacharrillos que se usan en las carreras para controlar los tiempos de los participantes? ­-Al otro lado del teléfono, su hermano menor asiste, perplejo, a la intempestiva consulta de mi colega.      ­-¿Pero tú estás mal o qué te pasa? ¡Qué es la una de la mañana! ¿No sabes que tengo que madrugar para preparar el doctorado?

   -Que sí, que sí; no me llores. Tú respóndeme y te dejo en paz. ¿Es posible trastocar esos chismes, sí o no?

   -Imagino que te refieres a los chips.

   -Sí, hombre, sí; los chips.

   Escamado, Jon se pregunta qué estará tramando el fullero de su hermano. No es la primera vez que recurre a él para sus chanchullos; no hace mucho, ya lo tanteó para tratar de reclutarlo como matón en un plan para mangar una bicicleta a un equipo profesional. Como era de esperar, aquella operación no llegó siquiera al grado de tentativa, pues Dandochepazos recuperó pronto la lucidez tras el arrebato que le llevó a urdir tan delictivo proyecto. Ahora, sin embargo, no acude a él por sus conocimientos avanzados de Judo, sino que busca su asesoramiento como ingeniero de telecomunicaciones. Es lo que tiene ser una persona aplicada y de recursos; que al final, los vagos y maleantes se aprovechan de uno para sus trapicheos.

   -Mira, no sé en qué estarás pensando ni quiero saberlo; pero como no entres en el sistema informático central, no hay manera de manipular los registros. Ten en cuenta que es un método de identificación por radiofrecuencia, y que no es tan sencillo alterar las mediciones.

   -¡Maldita sea! ­-exclama Dandochepazos­- Pues si que mes has servido de ayuda. ­-Vete a la mierda ­-le responde su hermano­-; eres un desagradecido y un chalado.

La ingesta masiva de Ventolin puede resultar fatal
y no garantiza el éxito. (imagen:dokteronline.com)
   Quemado su último cartucho, se guarda el móvil en el bolsillo y dobla una esquina. Un gato lo mira desde los bajos de un coche mientras se dirige a la trasera de un edificio destartalado. En los bajos, una cristalera y un letrero luminoso de Coca-Cola destacan entre un rosario de persianas roñosas y puertas tapiadas. Ya es casi la una y media de la mañana, pero la música sigue sonando en el interior del local.

   -Buenas; una cerveza ­-dice al entrar. ­-Buenas ­-saluda el camarero heavy después de hacer a un lado un bocadillo a medio terminar. En la pared, entre estantes repletos de botellas, el zombi macarra de Iron Maiden lo observa desafiante, con el sable listo para continuar con su escabechina.

   -¿Tú crees que tendría alguna posibilidad de hacer podium en la Pax Avant si me meto dos o tres Ventolines de una tacada? ­-sondea al barman cuando éste se acerca a servirle la Mahou. El pálido camarero se queda observándolo unos instantes, como pasmado, mientras se rasca la tripa por debajo de la camiseta. -¿Y eso qué es lo que es? 






5 comentarios:

Yeyu Golobariano dijo...

Madre. Este Dandochepazos esta cada día peor. ¡Qué pretensiones! ¡ Qué delirios de grandeza! Le aconsejaría que se pusiera en contacto con Amstrong o con el Doctor Fuentes, tal vez entre los dos le puedan dar algún "consejillo" para mejorar su rendimiento sin tener que matarse a entrenar, de forma rápida y eficaz. Parece que saben mucho del tema.
Si no, me temo que bastante tendrá con acabar las marchas a las que se apunte, lo cual tampoco es deshonroso (ni mucho menos); cuando alguien gana es porque hay perdedores detrás.
Un saludo.

CICLISMO NINJA I dijo...

Jjajajajaaa... real como la vida misma, oye otra solución q se cuenta en mi círculo de amigos globeros es q un conocido empresiarete de la zona le pagó algo a un crack para q llevara su chip en el otro tobillo, déjate de ventolines y machaques q perderás la salud... has visto la película: Parpaillón??? una peli francesa del año 1993, la dieron hace años en la noche temática, te puedo mandar una copia. Mi email: manolovik@hotmail.com

A.M.Y.P. dijo...

Hola, Yeyu. Ya sabemos todos cómo es este chaval; llevado por el entusiasmo, se viene arriba a la mínima, y luego todo son decepciones y lamentos.

Los métodos de Armstron y del amigo Eufemiano no le vendrían mal, no; pero me temo que la precaria situación económica de Dandochepazos no le permitiría satisfacer los honorarios de tan cualificados personajes. Un saludo

A.M.Y.P. dijo...

Buenas, Manolo. Si es cierto lo que se cuenta de ese empresario, me parece triste a más no poder. Tan vil artimaña no desmerece en absoluto a las lamentables ocurrencias a las que Dandochepazos nos tiene acostumbrados. De esa peli, ni papa, la verdad. Si no es molestia, sería bien recibida por este humilde 'globero'. Gracias por tu comentario.

CICLISMO NINJA II dijo...

Dame tu dirección postal a mi email y te la mando, un DVD por carta bastará, es una pelicula bien curiosa q te estimulará en tus relatos futuros. Ya lo verás. Manolovik@hotmail.com